lunes, febrero 08, 2010

Autovalores

De la palabra engrosada por su numeroso vencidario esperamos, en otra representación, una densidad asombrosa; mas siempre nos asombra la matemática con sus siempre crecientes vecindarios -y me refiero a los internos. Tomemos, pues, varias disciplinas y establezcamos el grafo de sus regiones. Sorprendámonos o, en su defecto, hagamos como que nos sorprendemos.

Obsérvese que, espectrales, acabaremos por dar valores (por ejemplo femeninos y democráticos ) a disciplinas que en tiempos no tan antiguos eran reas de irredimibles pecados. Fueran quedarán las piramides, las agudas jerarquías, el cromosoma Y.

Entretengámonos