Esos pronombres con descripción aneja que no suele describir. O su función individualizadora o personificadora cuando se trata de fenómenos naturales. Seguramente no podemos dejar que un nombre no describa, que un nombre no nos diga qué nombra, qué clase de cosa es ésa.
Son éstas consideraciones no sabemos si para una Filosofía de la mitología o para una Filosofía del tebeo.
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